La dureza del agua de Balears supone, en muchas ocasiones, un freno al tránsito circular y a la competitividad empresarial. Concretamente, su elevada concentración de cal tiene un impacto directo en la eficiencia energética −en la medida en la que la capa de cal que se forma en los intercambiadores de calor exige un gasto energético innecesario−, y en la estructura de costes −en tanto que implica sobrecostes asociados al mantenimiento y al desgaste de las infraestructuras–.
No en vano, también incide en el consumo de agua y otros recursos. En este sentido, los sistemas tradicionales de descalcificación utilizan un volumen considerable de agua, energía y sal regeneradora. Un recurso, este último, que corroe las instalaciones y acaba estando presente en las aguas residuales en grandes concentraciones, lo que dificulta su posterior reutilización.
Todo un reto que apela a descubrir nuevas soluciones que reduzcan el volumen de recursos necesarios para tratar la cal presente en el agua, minimicen la generación de residuos y favorezcan la reincorporación del recurso hídrico en el sistema.
BIOCAT es un dispositivo antical que no utiliza productos químicos ni sal regeneradora. Con un funcionamiento inspirado en la biomineralización, trata la cal del agua sin alterar su dureza, sabor, composición ni calidad, gracias al granulado catalizador WATERCryst que utiliza.
Así, reduce significativamente los requerimientos de agua para el aclarado −que, dependiendo del caso, pueden llegar a ser nulos− y da lugar a un agua tratada apta para el riego o la reutilización. Además, este sistema precisa un menor consumo eléctrico que, a su vez, es asumible con energía fotovoltaica.
Con todo, la vida útil de los componentes de este dispositivo es de treinta años, y el granulado catalizador tan solo debe renovarse cada cinco años. De esta manera, se consigue mantener el valor funcional de sus elementos durante el mayor tiempo posible, reduciendo, así, la necesidad de sustitución y la generación de residuos, entre otras cuestiones.
Hoy en día, más de treinta hoteles de Balears cuentan con este dispositivo antical −que pueden beneficiarse de un ahorro de hasta 10.000 euros anuales por instalación−, si bien es cierto que su uso a nivel internacional se extiende, también, a otro tipo de edificios como hospitales, viviendas, escuelas o edificios públicos.
Para saber más: https://www.watercryst.com/es/
WATERCryst es una empresa alemana-austríaca que opera en la arena de la tecnología desde hace más de tres décadas. Firmes partidarios de que la economía y la ecología deben de ir de la mano, desarrollan soluciones rentables y respetuosas con el medioambiente destinadas a proporcionar una protección antical sin químicos ni sal. Así, su apuesta por la innovación, la calidad y la seguridad se materializa a través de las certificaciones DVGW y ÖVGW con las que todas sus tecnologías BIOCAT cuentan –en Alemania y Austria, respectivamente–, la implementación de un sistema de gestión de calidad reconocido por la norma ISO-9001 y la obtención del galardón PLUS X AWARD® en las categorías ‘Mejor producto 2022’ y ‘Mejor marca 2022’.